Ella es la Madre Naturaleza: belleza, abundancia y fertilidad que engendra y asegura la vida. Eso indica que tu gusto por lo natural y tu disfrute de la vida no tiene límites. Eres una persona nutridota prodigando y generosa con quienes te rodean y compartes con entusiasmo las maravillas de la creación. Amas la vida en todas sus manifestaciones: montañas, playas y bosques; aves y mariposas; tierra fértil y blancas arenas; aguas cristalinas de manantiales, ríos y mares; la suave brisa, el sol, la luna y las estrellas. De hecho pude que te conmueva el deterioro del planeta y su atmósfera, la extinción de las especies, etc.Posees una creatividad ilimitada que se expresa de múltiples maneras. Puedes ser dulce y mansa, pero también fiera y peligrosa, como la naturaleza misma.
El esplendor y la abundancia llenan tu vida, cada día y en ella fecundas, creas y prosperas, pues tu mundo es prodigioso. Pero también puedes destruirlo todo como un huracán, cuando tu furia se desata!
Si te sintonizas con la expansión y la belleza de tu mundo y dominas los excesos de ambición y tus miedos, puedes aprovechar las oportunidades que se te brindan para vivir, crear y compartir. Sabes disfrutar de los pequeños placeres de la vida: respirar el aire puro, contemplar la majestuosidad del universo y la belleza de la naturaleza.
Eres de quienes paladea los sabores, cuidas tu cuerpo, compartes con seres sensibles y no te encierras en el materialismo o el dolor. Cuando te sientas mal, triste o desequilibrada, conéctate con lo mejor de ti y tus ideas tendrán eco, tus esfuerzos darán fruto e inspirarás a otros. La maravilla de la naturaleza es que tienes el don de dar vida desde tu poder interno. Así, tu fuerza expansiva nutre tu entorno y tus planes. Cuando lo decides inicias o reafirmas tu camino al éxito. Superarás los obstáculos con tu creatividad, capacidad productiva y conciencia práctica. ¡Eres capaz de crear cosas nuevas y bellas, haciendo la vida más próspera y fecunda!
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